Nuestra historia hasta el campeonato de España de kettlebell 2023

Más que buen resultado

BUENÍÍÍÍÍSIMOOOO

Porque los resultados no se miden sólo en medallas (¡¡¡que también las traen!!!). Se miden en experiencias vividas. En el proceso para llegar al campeonato. Los días en el gimnasio. Las risas. El sufrimiento de los entrenamientos. Todo suma para que la experiencia sea grande.

Y quiero contaros nuestra historia.

Sí, lo siento, tendrás que leer un rato. Pero tranquil@, ¡que le añadiré fotos y vídeos!

Empezamos con culpables.

El que inyecta el virus de las kettlebell en nuestro centro de entrenamiento es Gustavo Gaizarain. Hacia finales del 2018 aparece por nuestro centro, recomendado por un gran amigo, Pakito Usero, de Enerxica. Quiere preparar el mundial de la WKSF que se celebra en Dublín en 2019.

Nosotros somos preparadores físicos. De kettlebell, lo justo. Algún curso de un par de días y poco más. Pero como nos ha pasado con tantos deportistas, ahí empieza nuestro trabajo. Es lo más bonito. Se trata de analizar la modalidad desde todos los puntos de vista y, con todo eso, tratar de ayudar al máximo al entrenador de la especialidad y complementar lo que puede necesitar, cubrir las carencias que pueda tener y llegar un poco más allá. Dónde sólo con las kettlebells no puede llegar, trataremos de llegar nosotros. Ah!!!Y hacer que no pierda días de entrenamiento por lesión. Si no entrenas, no mejoras. Así que a cuidar las zonas débiles.

Seguro que piensas que si nos «enganchamos» a entrenar con las kettlebell, el campeonato saldría muy bien. Pues la verdad es que no. Gus, cuando llego a nuestro centro ya había sido campeón del mundo dos veces. Pero en Dublín se retiró. Una vez analizado ese resultado, a nosotros nos encantó seguir aprendiendo. Y a Gus, enseñar.

Empezamos a compartir ratos y hacer coincidir sus entrenamientos, con nuestros inicios. Moviendo las kettlebell como podíamos. Y a todos los que podíamos los incorporábamos al grupo.

Empezamos Sara Alonso, Joan Rodríguez (yo mismo, vaya) e íbamos sumando algún compañero a los entrenamientos. Chic@s de prácticas, usuarios del gym, tratábamos que todo el mundo probase las kettlebells. Íbamos sumando adeptos. Y nosotros, repeticiones. Migui se unió en breve al grupo también.

¡Cómo todo el mundo!

Quién no tenía una kettlebell en casa. Bueno, nosotros un poco más, dividimos el gimnasio. Wattbike, remo, kettlebell…un poco de todo.

Así que seguimos entrenando cada uno como podía. En el salón de casa, en el parking, en la terraza… pero todxs estábamos sumando repeticiones en casa.

Y nos volvimos a unir.

Tras mucho tiempo de entrenamiento e ir mejorando poco a poco vamos haciendo alguna minicompetición online, muy amateur todo. En páginas que suelen colgar retos en facebook y así íbamos teniendo referencias… de lo malos que éramos!!! Pero con ilusión, eso sí.

Avanzando el año 2019, Gus nos comenta que por qué no nos federamos en KSE (Kettlebell Sport España). Que si nos apetece competir más en serio, habrá que hacerlo bien. Y en España, se hace a través de esta asociación. Así que empezamos en 2021 asociándonos y compitiendo en la liga online. Y aquí aparece otra «culpable», en nuestra historia. Para que podamos estar TOD@S en el Campeonato de Valencia.

Rosa González. Presidenta de KSE.

Nosotros estamos habituados a movernos en silla de ruedas, muletas, etc. ese es nuestro día a día. Para alguien que preside un estamento y se le presenta un caso así, puede tener dos opciones. Tratar de facilitar las cosas y escuchar con mente abierta, o poner problemas y dificultades (como nos ha sucedido muchas veces).

En este caso, ha ido un paso más allá, si cabe. Nos ha ayudado en todo cediendo la iniciativa. Hemos desarrollado el reglamento de manera conjunta. Proponiendo, modificando, cambiando. Parece fácil, pero os aseguro que no. Hay muchas personas que no lo ven así. Con el tiempo nos encontramos con muchos muros. En muchas carreras y federaciones. Pero eso no importa.

Tú, que está leyendo esto, mueves las kettlebells y quieres competir. Álex y Migui también. No quieren ningún trato especial. Quieren entrenar, mejorar, competir y disfrutar del proceso. Si se puede ampliar el grupo de competidores, qué problema hay. Y si no se puede, porque no podremos competir a todo (eso lo tenemos muy claro), pues ya no lo pediríamos, que a veces queremos hacer cosas para las que no estamos capacitados. Y no tiene nada que ver con tener o no discapacidad.

El 2022 fue el año donde empezamos a volver a la vida más o menos normal.

Así que empezamos a viajar.

Y nos fuimos al campeonato de España que se celebró en Esquiroz, Pamplona.

Como os digo, nosotros somos un grupo. Nos olvidamos que unos caminan y otros no. Creo que todo el mundo debería normalizarlo así. Y estas competiciones ayudan. Una veces, te pediré ayuda. Otras, tu a mi. Como cualquier grupo de amigos. ¡¡Qué importa si caminas o no!!

Sorry, que me lio a veces.

Pues allí que nos presentamos, competimos y regresamos a Vigo, pero con una sensación especial. Hemos conocido a gente especial. A personas que en 10 minutos ya ves que son gente grande. Grandes personas. Y que aunque no te veas durante el año, podrás compartir muy buenos momentos en un futuro. Porque comparten una pasión contigo. Que es el deporte. En este caso las kettlebell. Pero podría ser otro. El deporte va más allá de todo esto.

Y creo que al resto de competidores también les hemos aportado otra visión. Por lo menos, lo siento así. Nos vamos contentos.

Y Rosa sigue peleando. Lo sé. Has peleado mucho. Y consigue que podamos ir al mundial de Oporto (WKSF), tras decirle a Migui que debía competir de pie, en la primera competición que hicimos online. No te extrañes al leer esto, nos han dicho cosas más extrañas aún. No pasa nada. Es desconocimiento y miedo. Entendemos que no hay mala intención.

Pues eso. Que nos vamos a Oporto, al campeonato del mundo y podemos formar parte de ese gran grupo y tratamos de hacerlo lo mejor que podemos y seguir aportando normalidad a la vida de las personas.

Muy contentos con el resultado conseguido. Hemos mostrado que no hay que hacer nada especial para que alguien en silla de ruedas participe. Así que esperamos que ese miedo, desaparezca.

Hay que abrir puertas y mentes. Nada más. Sabemos que es parte de nuestro trabajo. A veces es más fácil, a veces más difícil. Y a veces no se puede.

Tranquil@. Ya estamos en 2023. Llegamos al objetivo.

Ya lo has adivinado por la foto.

Conseguimos «engañar» a Álex.

Álex lleva cerca de 8 años entrenando en nuestro centro puente. Desde la Fundació Isidre Esteve, tratamos de normalizar el día a día a través del ejercicio físico. Tenemos un centro en Vigo y otro, en las instalaciones del CAR de Sant Cugat. Son sitios distintos. Pero únicos.

Álex, como cualquier persona que va al gimnasio, va poco a poco mejorando su condición física. Las kettlebell ya forman parte de su entrenamiento desde hace mucho tiempo y, desde hace unos meses, empezó a surgir la idea de tratar de competir. Y ahí que decidimos orientar los últimos meses a poder aguantar 10 minutos con un cambio de brazo. Te aseguro que no es fácil. Aunque no lo haya sentido «mis carnes». Pero casi.

Muy despacio. Porque sus hombros no son los tuyos, Si se lesiona no puede salir de casa. ¿Quién moverá la silla? ¿Quién se pasará al coche? Muy progresivo. Todo. Observando. Mejorando. Hasta que pensamos que estamos preparados. Y que se puede llegara a competir.

Y otra vez. Rosa lo facilita todo. Para que podamos ir a competir a Valencia.

Así que vamos. Billetes comprados. Y hotel.

Como te he dicho. Esto no va de competir. Bueno, una parte si. Pero se trata de la aventura. Y un viaje con dos sillas… siempre es una aventura.

Los dos vuelos de la ida retrasados. El enlace entre ellos, a pesar de ser algo surrealista y pensar que parecía que no llegábamos, llegamos. De milagro, pero sí.

Tras ver que los taxistas en el aeropuerto de Valencia preferían parar antes de la zona prioritaria para personas con movilidad reducida, y recoger otros pasajeros «normales», no queda otra que interrumpir la subida de pasajeros para ver si alguno quiere hacer su trabajo. Lo dicho antes, no es más que desconocimiento (y a veces pereza), ya que las sillas ocupan menos que las maletas grandes plegadas.

Llegamos al hotel y siempre te queda la duda de cómo será la adaptación del hotel. En este caso, perfectísima. Hotel Eurostars Gran Valencia, por si tienes diversidad funcional, y si no, también.

Tras un paseo por el río, llegamos al lugar de competición para el pesaje. Reencuentros con compañeros que no vemos tras unos meses, y otros que ahora ves por redes sociales pero que no has visto en directo nunca.

Sí, aunque nos hagamos los locos, también vemos las caras de los que piensan que a ver qué hacen éstos. Pero tranquilos, que cada vez quedan menos. Llegará un momento que los veas como a otro compañero. Que no veas la silla. Sólo a la persona. En eso estamos. Y ya sois la mayoría que lo sentís así. Gracias a todos por integrarnos de verdad.

Y nada más… que llega la competición.

El debut de Migui y Álex, que van juntos, en la misma serie.

Migui mejora su marca en LCPress en más de 20 reps, con 16 kg. Buen trabajo Migui.

Álex hace 94 reps en Press. Una marcaza. Y aún se queda jodido por que su brazo izquierdo a falta de 55 segundos dijo basta. Suerte que algunos lo vemos al revés. Su brazo izquierdo hizo casi tres minutos con 6 kg. Cuando antes no podía levantar su propio peso. No llegaba a la vertical.

¿No te he dicho que la competición era lo de menos? Sólo era una excusa. Pues eso es.

Al día siguiente me toca a mi. Con todo esto de ir entrenando a distintos deportistas, me toca entrenar también para no hacer el ridículo, así que me decido por la media horita de snatch. 510 reps con 24 kg. Mejorando mi anterior marca. Así que más que feliz por tratar de transmitir lo bueno del deporte a mis compañeros de equipo.

Y para finalizar, la prueba de relevos. En la que otra vez Rosa, vuelve a aparecer. «Haced cómo queráis». Con una. con dos kettlebells, jerk, snatch, LC… Más facilidades imposible. Bueno, no. Aún se puede mejorar. Y es querer hacer los relevos. Joder, qué honor. Rosa y Alain como miembros de uno de los equipos. Y ahí es donde se incorpora Sara, en la prueba de la estafeta.

Pues así que hacemos los relevos (gracias por ir de paseo Rosa y Alain) y culminamos el campeonato con esto.

Nos vamos del campeonato con sentimientos que no se pueden expresar con palabras. Momentos en los que lloras de alegría. De ver a los compañeros mejorar  (no sólo sus marcas, es secundario), los nervios de la competición, conocer mejor a las personas.

¡Bufff, qué campeonato!

Y a pesar de perder el vuelo de conexión a en Madrid, llegar de madrugada, atascarnos en un ascensor a la una de la madrugada… esas son las experiencias que nos quedan. Lo que contaremos después.

Sólo nos queda descansar unos días (no muchos) y seguir mejorando para vernos en el siguiente campeonato. Que seguirá siendo la excusa. El deporte como excusa.

Gracias a todos los que habéis compartido parte de vuestro tiempo. Nos vemos pronto. En las tarimas si puede ser. Si no, por la vida.